El informe elaborado por la Universidad de Cantabria, encargado por el Gobierno de Navarra sobre el impacto de la actividad de Mármoles del Batzán en la cantera de Alkerdi, próxima a las Cuevas de Urdax, consideradas patrimonio de la Humanidad, indican que la actividad, “no supone ningún riesgo para la conservación del patrimonio”, siempre y cuando se respeten distancias y cargas resultantes del estudio.
La llegada del informe documento coincidió con la visita de los parlamentarios de la comisión de Cultura, a quienes se entregó una copia.
Según las conclusiones expuestas el pasado 12 de octubre de 2014, en su comparecencia parlamentaria por el Consejero de Cultura del Gobierno de Navarra, ni la voladura del 15 de julio de 2014, ni ninguna otra de las efectuadas por la empresa, afectaron de manera alguna al patrimonio de la zona. Las cuevas catalogadas como bien de interés cultural (BIC) “no han sufrido daño alguno”, como así lo acreditaron los informes realizados por la Institución Príncipe de Viana.
Asimismo, todos los informes técnicos realizados a instancias de las instituciones públicas “son favorables para la continuidad de los trabajos de explotación de la Mina de Alkerdi, ya que muestran la compatibilidad de la actividad de la cantera con el mantenimiento y preservación de los recursos patrimoniales del entorno”. Según la empresa adjudicataria, la voladura producida el 15 de julio del año pasado tuvo, por distintas circunstancias, entre ellas las meteorológicas, “un carácter excepcional”. Antes, y desde 2012, se realizaron “otras cuatro voladuras más, alguna de carga similar, y sin ningún tipo de reacción de los habitantes de la zona”.
Con todo, la empresa afirma que está dispuesta, en colaboración con el Ayuntamiento de Urdazubi/Urdax, a desarrollar un protocolo de actuación “para las relaciones con los vecinos”. Mármoles del Baztán asegura ser la “primera interesada en preservar, mantener y difundir la riqueza patrimonial de Urdax”. “Siempre ha sido respetuosa con el entorno y su compromiso con el medio ambiente y la riqueza patrimonial de las áreas de trabajo son aspectos prioritarios en el desarrollo de su actividad”, agrega. Así, se compromete a poner en marcha, en coordinación con el Ayuntamiento de Urdax, un plan de Responsabilidad Social Corporativa (RSC), que sirva “para impulsar el desarrollo y promoción social y turística del entorno, y en particular de las cuevas catalogadas como Bien de interés Cultural”. Es urgente, considera la empresa, que la Administración apruebe el plan de reanudación de la actividad, cumplidos todos los trámites; y cualquier retraso pone en peligro la continuidad de la actividad.
