La Diputación de Málaga entra a formar parte de la Mesa del Sector de la Construcción de Málaga (MSCM), integrada por los principales colegios profesionales y colectivos empresariales relacionados con este ámbito en la provincia, en la que aportará medidas que ayuden a paliar la crisis que sufre esta actividad.
El ente supramunicipal, que da así cumplimiento a un acuerdo institucional de pleno alcanzado el pasado mes de mayo, sumará a la MSCM todos los recursos disponibles en virtud de sus competencias, entre las que destacan la agilización de los planes generales de ordenación urbana municipales o el producto residencial ‘Living Costa del Sol’.
La integración se ha cerrado en una reunión celebrada con el sector de la construcción en la sede de la Diputación, a la que asistieron su presidente, Elías Bendodo, y el diputado de Presidencia, Carlos Conde.
Al respecto, Bendodo señaló que la Diputación redacta los PGOU del 70 por ciento de los municipios malagueños, ya sea de forma directa o a través de una encomienda de gestión a la Sociedad de Planificación y Desarrollo (Sopde). El presidente estimó que este aspecto es fundamental para los constructores, «ya que urgen a las instituciones a concluir los planeamientos para tener la base legal con la que trabajar».
En estos momentos, todos los documentos urbanísticos en los que participa el ente supramunicipal, coordinados por el Área de Arquitectura, Urbanismo y Planeamiento que dirige Ignacio Mena, están concluidos y remitidos a la instancia superior, la regional, para que lleve a cabo las correspondientes revisiones y aprobaciones definitivas. «A la crisis propia de la construcción no se puede sumar una paralización normativa porque el perjuicio sería aún mayor», ha señalado Bendodo.
Por otro lado, la Diputación realizará un papel de interlocución entre la actividad económica representada en la MSCM y los municipios de la provincia. Para ello, se creará un canal de comunicación continua que pueda canalizar las principales inquietudes de este sector, entre las que destacan una necesidad de reconversión con búsqueda de nuevas oportunidades más allá del residencial; la conclusión del saneamiento integral de la Costa del Sol, y la tardanza en el cobro por trabajos realizados.
En este sentido, la institución que preside Bendodo está al día en pago a proveedores tras el abono de atrasos por valor de 55 millones de euros en el pasado mes de marzo, algunos de ellos correspondientes incluso a la década anterior. Además, el plazo medio de pago se sitúa por debajo de los 30 días.