Pavlidis Marble Granite es una de las principales empresas griegas dedicadas al procesamiento de piedra natural que acaba de sustituir su antigua línea de resinado por una nueva, en esta ocasión también de la marca italiana Simec.
La firma griega se ha consolidado a nivel internacional en la elaboración y suministro de materiales pétreos de la mano de Cristoforos Pavlidis, hijo del fundador de la empresa, con especial referencia al tratamiento de mármoles blancos Dolomita de los que la empresa posee varias canteras.
La colaboración entre Simec y Pavlidis viene de lejos y se remonta a 1997 y, hoy, en la planta de Drama, sede de la empresa, la mayor parte de los procesos se realizan con sistemas Simec.
En total Pavlidis Marble Granite cuenta con 12 telares de mármol Sfera, dos líneas de pulido de tablas, dos líneas de pulido de baldosas y dos líneas de recubrimiento de resina.
La línea de resinas instalada en 2019 ha sido sustituida por una nueva igual que la anterior, ambas con alimentación eléctrica para los hornos, para aprovechar la presencia de una gran instalación fotovoltaica instalada encima de la planta.
En ambos casos se trata de hornos de torre tipo PILOT de 60 plantas con sistema de cámaras apiladas y una unidad de compensación, que requirieron posicionamiento bajo el nivel del suelo para permitir su instalación en la nave.
La nueva línea está conectada a la anterior línea de resinas y a la línea de lijado, que da servicio a ambas, a través de un sistema de transporte automatizado que permite el flujo de material de una línea a la otra sin necesidad de puentes grúa y grúas. Como suele ocurrir en las plantas SIMEC, también en este caso todas las líneas pueden trabajar juntas o de forma totalmente independiente.
Los productos Stella d’Oro también fueron elegidos por Pavlidis para la construcción de una planta de producción en Macedonia del Norte, que incluía 4 telares de bastidor abierto M50 y una línea completa de pulido de losas.
Parece que la colaboración entre Pavlidis y Simec se ha convertido en una colaboración sólida con el tiempo, «basada en la confianza mutua, la innovación tecnológica y una visión común de crecimiento sostenible», en palabras de Simec.