El Instituto de la Construcción y el Medio Ambiente (IBU) de Alemania tiene para la piedra natural una Declaración Ambiental de Producto (EPD) de conformidad con la norma ISO-tipo III. Esta norma incluye información sobre los efectos ambientales que causan los productos de piedra natural, desde la fabricación hasta su eliminación. También incluye datos sobre las necesidades de energía y de recursos, así como información para conocer el impacto del material sobre el efecto invernadero y el agotamiento del ozono. Además, también permite conocer información relevante sobre las propiedades de campo de la construcción, tales como durabilidad, aislamiento térmico y acústico, o la calidad del aire interior de un edificio.
A través de las Declaraciones Ambientales de Producto, los materiales se pueden comparar en términos de las preocupaciones ecológicas y de sostenibilidad. En materia de contratación pública, se les reconoce, cuando se trata de demostrar el cumplimiento de los requisitos ambientales.
La exposición de la EPD para la piedra natural se hará por cuenta de Euroroc y por sugerencia de la DNV. Dado que los criterios ambientales juegan un papel cada vez más importante, las asociaciones creen que la certificación podría proporcionar a la piedra natural un mejor posicionamiento frente a otros materiales de construcción dadas sus ventajas. La piedra natural es sostenible. Y: «La textura natural, versatilidad y durabilidad (…) lo convierte en el producto de construcción ideal para todos aquellos que piensan ambientalmente responsable y sostenible», escribe la DNV en un comunicado de prensa. La EDP si puede obtener a través de Euroroc.