En 2014 el comercio internacional de productos de piedra alcanzó 22,8 mil millones de euros, un incremento del + 1,8% y supuso un intercambio de unos 86 millones de toneladas (+ 7,4% respecto a 2013). En primer país en demanda interna es China, que importó 14,7 millones de toneladas de materiales de piedra con un valor de 2,2 mil millones (+ 4% en cantidad y un 2,5% en valor en comparación con 2013). El segundo mayor mercado es Estados Unidos que importó casi 2 mil millones de euros y realizó un incremento del 5% en comparación con 2013.
Surgen los primeros signos de recuperación en el mercado europeo, los países de la UE importaron un valor total de 2,3 mil millones de euros, con un pequeño 0,3% de incremento, pero aún está lejos de los 2,6 millones de dólares en 2012.
Estas cifras representan sólo una vista previa del contenido del estudio Stone Sector 2015, el informe anual realizado por Internazionale Marmi e Macchine en colaboración con CNRCNR IRCRES, y que recoge el presupuesto y las perspectivas del comercio internacional de productos de piedra y que ha sido presentado la semana pasada.
El estudio recoge los datos sobre el sector de la construcción internacional navegado por los distintos países con alto crecimiento para los que podemos esperar un aumento sustancial de la demanda de productos de piedra en un futuro cercano.
China sigue siendo el líder mundial tanto para la importación como para la exportación de piedra con un volumen de negocios de 2014 de 6,8 mil millones de euros, pero, aunque en aumento, a través de un período de transición que está liderando un modelo de desarrollo atento a la calidad y la sostenibilidad.
Italia es el segundo país en términos de participación de mercado, representa el 13,5% de las exportaciones mundiales. La industria de la piedra italiana se está posicionando poco a poco en nichos de mercado que requieren productos de alto valor añadido, con estándares de calidad muy altos. La voz principal de las exportaciones italianas del sector es el de mármol elaborado, que marcó un descenso del -3,5% para las toneladas exportadas, pero con un aumento en valor de 3,8%.