En medio del creciente interés por la sostenibilidad en el ámbito de la construcción en Noruega, las opiniones de Jon Løkkeberg, un representante de la empresa noruega Utomhus Naturstein AS, arrojan una luz sobre una cuestión controvertida: el uso del granito chino en obras de construcción noruegas y su impacto en las emisiones de carbono.
Løkkeberg pone sobre la mesa una pregunta pertinente: ¿Es el cambio climático un problema local o global? A pesar de los esfuerzos para impulsar la sostenibilidad a nivel local, Løkkeberg sugiere que este enfoque podría no ser suficiente para abordar el desafío climático en su totalidad. El énfasis en la electrificación interna de Noruega, argumenta, no garantiza la eliminación de los problemas climáticos en el país nórdico.
Para respaldar su análisis, Løkkeberg presenta un ejemplo concreto relacionado con la elección de materiales para pavimentos de piedra natural en obras de construcción en Oslo. Aquí, el granito chino se convierte en un punto de controversia. Løkkeberg enumera cuatro opciones distintas, todas basadas en la instalación de losas de granito con diferentes factores de emisiones de CO2eq por tonelada. Curiosamente, la opción que implica la importación de granito chino, con un resultado de aproximadamente 191 kg CO2eq / tonelada, a menudo prevalece a pesar de su huella de carbono significativamente mayor en comparación con las alternativas locales.
Løkkeberg plantea preguntas fundamentales sobre esta preferencia persistente por el granito chino. ¿Se debe a consideraciones de costos? ¿O tal vez a la disponibilidad y accesibilidad? El hecho de que Noruega cuente con varios productores de granito y una capacidad en crecimiento podría hacer que la elección local sea más atractiva desde una perspectiva ambiental. Además, Løkkeberg señala la cuestión de la calidad, ya que los productores noruegos están sujetos a las normativas y regulaciones nacionales, lo que garantiza un estándar que cumple con las normas legales y éticas del país.
En última instancia, la crítica de Løkkeberg resalta la necesidad de un enfoque más holístico en la toma de decisiones en la construcción noruega. Su análisis plantea interrogantes sobre cómo las elecciones en el ámbito local pueden tener implicaciones más amplias en la lucha global contra el cambio climático. Con un enfoque en la elección de materiales que afecta directamente las emisiones de carbono, el debate sobre el uso del granito chino en Noruega adquiere una dimensión más profunda y conlleva una reflexión sobre el equilibrio entre consideraciones económicas y ambientales.
