En España, las empresas familiares representan el 92,4 % del tejido empresarial, generan el 70 % del empleo privado (más de 10,2 millones de trabajadores) y suponen el 57,8 % del Valor Añadido Bruto privado, según el informe Empresa Familiar en España 2025 del IEF, KPMG y SAP. Aunque muchas superan treinta años de trayectoria, solo el 29,3 % han realizado al menos un relevo generacional, y solo el 1,2 % pertenecen ya a la tercera generación.
Ese panorama general adquiere una dimensión especialmente urgente el sector de las marmolerías. En los últimos años han cerrado talleres emblemáticos, y muchos otros están en riesgo por no encontrar sucesores.
Casos concretos
Entre los casos más recientes de marmolerías que no han contando con relevo generacional figuran Mármoles Guijarro Biosca en Castellón, Mármoles y Piedra Sanga, en Belmonte (Cuenca) o Mármoles Bruch en Oviedo.
La ausencia de planificación o, directamente, la falta de un sucesor ocasionan que el esfuerzo de la generación emprendedora se ponga en peligro.
El Gobierno de Aragón ha presentado un innovador programa diseñado para promover el relevo generacional en las pymes, con el objetivo de facilitar la transferencia de negocios viables que, por falta de relevo generacional, están en riesgo de cerrar. Se trata de una iniciativa estratégica que busca garantizar la continuidad del tejido empresarial en toda la región aragonesa, contribuyendo además a la fijación de población, al impulso del empleo y del emprendimiento, y al desarrollo económico.
El relevo generacional en marmolerías no es solo el paso de testigo de unos dueños a otros; implica modernización, adaptación normativa, innovación productiva y valor añadido. Si no se afronta con una estrategia clara, muchos talleres no aguantarán el empuje de los costes, la competencia y las nuevas exigencias (medioambientales, de seguridad, de diseño).
Las zonas rurales, pueblos con baja densidad de población, donde los jóvenes tienen que emigrar para formarse o trabajar, son las más golpeadas por los problemas de relevo y donde se reduce mucho la base de posibles sucesores.
En los casos en los que el relevo generacional no sea posible. Sin duda la mejor opción es vender, pero esto no siempre es fácil si no se hace de forma planificada y acompañado por una empresa especializada.