La Asociación Mármol de Alicante, junto con el Cluster de la Piedra, reclaman una pronta solución al conflicto de los estibadores del Puerto de Valencia. Así, en un comunicado manifiestan que «apelamos a las autoridades competentes a intervenir para dar soluciones al conflicto que viene arrastrando el Puerto de Valencia y que ha desembocado en una movilización de los estibadores, ya que nuestra actividad económica está siendo gravemente afectada».
A pesar que se han desconvocado los dos últimos días fijados de huelga previstos para esta semana, esto no ha evitado que las empresas del sector de la piedra natural sigan registrando demora en la carga de sus contenedores, debido a que los estibadores no están trabajando al cien por cien, sino que se hacen paros en horas alternas. Además, las navieras principales reconocen estar desviando tráfico a otros puertos, evitando el puerto de Valencia, con lo que muchas de las mercancías quedan en el puerto valenciano sin ser embarcadas. «Esta situación hace que se estén incumpliendo muchos de los contratos establecidos y avalados por cartas de crédito de los clientes, algo que resulta inviable por no tener alternativas de transporte».
El sector ve con preocupación esta situación que si se demora más en el tiempo va a suponer un perjuicio importante a nivel económico, están en juego gran cantidad de operaciones comerciales, así como puestos de trabajo. «También hay que tener en cuenta que la autoridad portuaria tiene fijadas unas tasas por la ocupación de los contenedores en el puerto cuya decisión final depende de las propias terminales aplicarlas, lo que supone un coste adicional originado por una situación totalmente ajena, y a todo esto se suma el incremento que se viene registrando en el coste de los fletes».
Según reza el comunicado: «Una vez más nos encontramos en grave riesgo al no poder atender a nuestros clientes y ver peligrar el cobro de las mercancías que no tienen salida, ya que por los destinos, no tenemos opción de utilizar el transporte de carretera. Teniendo en cuenta que el sector de la piedra natural es principalmente exportador, la repercusión es gravísima».