El Comando Provincial de la Guardia de Finanzas de Roma han ejecutado un decreto de incautación de bienes emitido por el juez de instrucción preliminar del Tribunal de Tivoli, a petición de la Fiscalía Local contra los autores de delitos relacionados con la quiebra de una empresa conocida que opera en el sector del travertino, por fraude fiscal y fraude contra el estado. En particular, los financieros del Grupo Tivoli y de la sección local de PG, coordinada por el fiscal tiburtina, han permitido descubrir el diseño criminal concebido y establecido por una asociación, formada por empresarios y profesionales, que habían provocado una quiebra de 11 millones de euros.
La actividad investigadora comenzó precisamente a partir de la presunta venta de una sucursal de la compañía antes del inicio del procedimiento de quiebra de la compañía. De hecho, del análisis de la documentación contable se desprendió que en comparación con el valor real de los activos que componían la división de negocios, incluida la maquinaria para la extracción de travertinos y almacenes industriales, subestimó ampliamente dichos activos, había vendido los activos corporativos a otras compañías, siempre atribuibles a ellos por solo 160.000 euros. Esta operación solo fue instrumental para la eliminación de activos de los acreedores y del Tesoro. Con estas suposiciones, 7 personas fueron inscritas en el registro de sospechosos, todos en competencia entre sí por quiebra fraudulenta.
Al final de las investigaciones, el Fiscal de la República de Tivoli también solicitó y obtuvo del GIP competente la incautación de los activos y recursos financieros de los miembros por un valor total de más de 4 millones de euros. Los militares han identificado y sellado los sellos de villas de lujo y numerosas tierras, así como también han incautado varias cuentas bancarias actuales con más de 1 millón de euros depositados allí.
