Los 66 trabajadores de Grabasa de Burguillos del Cerro solicitan la extinción de los contratos», según declara el responsable del sector de la Construcción, Metal y Afines de CCOO, Mateo Guerra.
El objetivo ahora es que los trabajadores puedan cobrar cuanto antes las indemnizaciones que les corresponden por despido y las tres mensualidades que aún les adeuda la empresa para poder invertir las cantidades en una nueva sociedad laboral que gestionen ellos mismos y que les permita explotar las canteras de granito de la zona, donde aseguran que la única alternativa laboral es la ganadería.
En la cita que el Consejo de Administración tiene prevista con la Junta que iba a aportar capital a la empresa, los auditores de Grabasa tratarán de refutar los datos del informe elaborado por la consultora externa Deloitte para la empresa pública Avante con la información que les han facilitado los administradores concursales y otras tasadoras externas. Mientras el estudio de Deloitte desvela que el patrimonio neto de la empresa es de -4,6 millones de euros, la fábrica defiende que este asciende a 5,8, unos diez millones más. La auditoría de la Junta desvela también que en Grabasa existen irregularidades contables desde el año 2006 al haber incluido los administradores los derechos de explotación de una veintena de canteras como existencias propias de la empresa.
También confirmó que los activos están sobrevalorados en el plan de viabilidad presentado el pasado mes de abril y que las medidas que este incluye difícilmente podrán resolver los problemas de la empresa. Al considerar que el patrimonio neto de Grabasa son -4,6 millones como apunta Deloitte, la Junta se niega a aportar los 2,2 comprometidos ya que de todas formas, la factoría seguiría en números rojos y por ley, estaría abocada a la disolución.
Por su parte, el consejero delegado de Grabasa, Antonio Surribas, señala que el estudio que ha realizado la empresa para que Avante entrará a formar parte de su capital social se ha elaborado por la Administración Concursal y por tasadoras independientes que nada tienen que ver con los activos de la empresa. «Las han realizado técnicos de absoluta independencia y son los números transmitidos a la Junta de Extremadura para que estudiaran la posibilidad de entrar como accionistas en Grabasa.No queremos entrar en guerras de comunicados y por tanto, no haremos ninguna nueva declaración hasta la reunión del próximo viernes con el Presidente Monago, en la que le transmitiremos claramente todos nuestros datos», declara Surribas.