La dirección de la empresa Grupo Guidoni, uno uno de los principales actores globales del sector de las piedras ornamentales y superficies de cuarzo, con presencia consolidada en más de 70 países, y propietaria de la española Guidoni Quartz, ha querido dejar clara su posición en relación a la situación económica de la empresa, que tiene activo un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) que afecta a 31 trabajadores de una plantilla de 131.
«Queremos dejar absolutamente claro que no existe ninguna intención de iniciar un proceso concursal ni de cesar la actividad de Guidoni Quartz Surfaces S.L. Seguimos plenamente comprometidos con la recuperación comercial y financiera de la unidad y creemos firmemente en el potencial del negocio», ha afirmado Rafael Guidoni CEO del Grupo, en declaraciones en exclusiva a Focus Piedra.
«Estamos convencidos de que, con responsabilidad, diálogo social y visión estratégica, superaremos esta etapa y consolidaremos la planta de Narón como un pilar fundamental de nuestra operación internacional».
Retos recientes y contexto global
En palabras de Guidoni: «En los últimos años, el sector de las superficies de cuarzo ha enfrentado un entorno global sumamente desafiante, una realidad que afecta a todos los productores europeos, incluida la operación de Guidoni en Narón (A Coruña)».
Relata que :«la crisis provocada por la pandemia de la COVID-19 fue seguida por un prolongado ciclo de subidas generalizadas de los tipos de interés, lo que ralentizó considerablemente el sector de la construcción, especialmente en Estados Unidos, uno de los destinos históricos más relevantes para las exportaciones de superficies europeas».
Paralelamente, explican que «el sector se vio expuesto a un exceso de oferta global procedente de países asiáticos, con productos que en muchos casos se comercializan en condiciones de competencia desleal y a precios artificialmente bajos, presionando significativamente los volúmenes de venta y los márgenes de los fabricantes europeos».
Por último, la reciente imposición de aranceles por parte de Estados Unidos sobre productos de origen europeo «restringió sustancialmente el acceso a ese mercado, afectando directamente a plantas como la de Narón, que contaban con ese destino como canal estratégico de salida».
Medidas en curso para garantizar la continuidad de la actividad
Ante este contexto, el Grupo Guidoni ha puesto en marcha un conjunto de acciones coordinadas para preservar la viabilidad de su operación en Narón.
La empresa afirma que han implementado ajustes presupuestarios y operativos enfocados en la eficiencia y la sostenibilidad financiera. «Al mismo tiempo, estamos desarrollando nuevos productos con mayor valor añadido, dirigidos a nuevos mercados y perfiles de clientes, acompañados de una estrategia de capilarización comercial en mercados alternativos. También se han realizado aportaciones de capital por parte de los socios, reafirmando su compromiso con la continuidad del proyecto industrial».
Por otra parte, señalan que: «mantenemos un diálogo permanente con las instituciones públicas, en particular con la Xunta de Galicia, a través del IGAPE y de la Consellería de Emprego, con el fin de acceder a mecanismos de apoyo y colaboración. En el ámbito laboral, se ha implementado un ERTE como medida preventiva y temporal, acordada en diálogo con el comité de empresa, con el objetivo de ajustar la producción al contexto actual de la demanda».
La inversión en España – Guidoni Quartz Surfaces S.L.
La entonces Guidoni Quartz Spain fue adquirida por el Grupo Guidoni en enero de 2016. En aquel momento, la planta contaba con una línea de producción instalada en 2003, con 13 años de funcionamiento, y una plantilla de aproximadamente 30 trabajadores. «Ante la creciente demanda global de superficies de cuarzo, identificamos la necesidad de ampliar y modernizar la planta industrial para adaptarse a los nuevos formatos y diseños exigidos por el mercado, los cuales no podían ser fabricados con la línea existente ni adaptarse tecnológicamente a la nueva realidad2, explican.
A partir de ese diagnóstico, el Grupo decidió invertir en una segunda línea de producción, que fue implantada durante el año 2018 y entró en funcionamiento en enero de 2020. En pocos meses, la capacidad productiva estaba completamente utilizada, y el número de empleados alcanzó unas 170 personas a mediados de 2020. Como resultado de esta expansión y del nuevo posicionamiento de la planta, la unidad pasó a registrar una facturación media anual de aproximadamente 41 millones de euros durante los dos años siguientes, representando cerca del 38 % de la facturación total del Grupo Guidoni en ese mismo período.
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