Jesús Goenaga es el gerente de Mármoles Aztiria, una empresa guipuzcoana fundada en 1988 por Luis Ignacio Aztiria Lazcano y dedicada a la elaboración de piedra natural. El primer local tenía 300 metros cuadrados y se dedicaba a la pequeña obra: encimeras y trabajos para los cementerios, pero paulatinamente la empresa fue creciendo y el año 2002 se trasladó al actual pabellón de 2.000 metros cuadrados ubicado en Azpeitia, dando un salto cualitativo tanto en maquinaria como en diseño. Paralelamente, Aztiria también aumenta el ámbito de actuación y las líneas de negocio abarcando obra grande y pequeña, fabricación de encimeras y todo tipo de trabajos de arte funerario.
Mármoles Aztiria cuenta en la actualidad con 20 empleados capitaneados por Jesús Goenaga. Hablamos en exclusiva con él para conocer su visión del negocio.
¿Cuáles son en su opinión los puntos fuertes de Mármoles Aztiria?
La aportación de todos en todo. Todo es importante: vender en condiciones, producir en condiciones, garantizar el resultado, servicio postventa.
¿Cree que las marmolerías de su área de influencia tienen algún tipo de característica o forma de trabajar que las diferencia de las de otras zonas en cuanto a la relación con las tiendas de cocina?
Creo que no. La relación con las tiendas es básica, debe ser fluida y constante, siempre desde la confianza.
Tiendo en cuenta que el 60% del negocio Mármoles Aztiria es la elaboración y colocación de encimeras. En su opinión, ¿cómo ha evolucionado el mercado de encimeras de cocina en los últimos dos años?
Con la crisis se ha ralentizado. La producción sin embargo, como siempre demanda productos y colores nuevos. El presupuesto destinado a la encimera, dentro de la cocina entera, ha disminuido, pasamos de encimeras regruesadas de 3 centímetros de espesor a las de 2 centimetros.
¿Cuál es la tendencia ahora mismo en encimeras de cocina?
En cuanto a colores las tendencias serían blanco, gris claro, gris oscuro, negro, el espesor 2 centímetros, por precio y porque ofrece garantías cuanto a materiales el cuarzo es el número uno, y entre los cuarzos la marca Silestone.
¿Aprecian diferencias a la hora de elaborar una encimera dependiendo del fabricante?
Sinceramente, entre los cuarzos no hay diferencia alguna.
¿Qué es lo que más valoran de un fabricante de encimeras para poder trabajar con él?
El precio competitivo es importante; pero es muy importante también el servicio diario, servicio postventa, el seguimiento de incidencias, marketing del producto, ayudas en exposiciones, productos auxiliares (pegamentos, siliconas).
En cuanto a encimeras realizadas en piedra natural, ¿cuál considera que es el material más demandado y por qué?
Sin duda el granito negro zimbawe en diferentes acabados. Es un granito de grano fino que encaja perfectamente en color.
¿Por qué considera que los materiales como Techham o The Size les están costando más hacerse un hueco en el mercado de encimeras de cocina?
Personalmente creo que no están pensados para la encimera. El formato de la tabla encarece el producto final, incluso el tipo de espesor aumenta excesivamente el coste de la mano de obra.
Las principales incidencias en encimeras de cocina siguen siendo las roturas y los daños por choque térmico. ¿Quiénes están asumiendo estos costes?
En un principio lo asumíamos entre el marmolista y el fabricante, últimamente, por lo menos en la mitad de los casos, es el cliente final a través de su seguro quien asume el coste.
Otra de las líneas de negocio de Aztiria en la que tienen gran experiencia ha sido el suministro y colocación de piedra natural para fachadas. ¿Qué obras han realizado recientemente?
Generalmente son fachadas de viviendas nuevas. Hemos realizado viviendas en Orio en Macael abujardado,
viviendas en Ordicia en Cenia arenada y basalto apomazado y viviendas en Zumarraga en Cenia flameado, blanco real y verde pradera.
¿Qué tipo de piedra natural es la que más se demanda?
Macael y Cenia.
Muchas marmolerías se están planteando también el poder exportar. ¿Están ustedes haciendo este planteamiento?
Por cercanía al sur de Francia y por escasez de demanda local, no queda más remedio.
Sin duda el futuro está en la exportación. La marmolería que enfoque mejor la exportación, que no es fácil, afrontará con mas garantías el futuro.
¿En qué tipo de acciones cree que deberían las marmolerías centrar los esfuerzos o reorganizar su negocio en estos momentos en los que la demanda nacional está tan deprimida?
El objetivo es ampliar la zona de mercado mediante la internacionalización. La unión entre marmolerías será básico para soportar costes, no hay otra solución.
¿Cuáles son las expectativas de Mármoles Aztiria para el fin de este ejercicio?
Para el ejercicio 2013 la idea es de mantener la empresa en condiciones económicas óptimas que aseguren la perfecta viabilidad, haciendo hincapié en el control de la cartera de impagados.
Por otra parte, para finales del 2013 marcaremos una línea de trabajo que se centrará en el crecimiento del mercado exterior.
