Mármoles Miñarro, a través del Instituto de Fomento, ha sido una de las ocho empresas que ha contado con ayudas económicas para implantar alguna de las tecnologías 4.0 a sus productos o procesos productivos e incorporarse así a la denominada cuarta revolución industrial.
En el caso de Mármoles Miñarro, su proyecto ha consistido en la introducción de un robot con capacidad de modelar la piedra en 3D que aumenta de forma considerable la productividad de la empresa y en el desarrollo de un sistema de almacenaje inteligente. La empresa, especializada en el trabajo con mármol y piedra natural, se caracteriza por mantener una firme apuesta por la innovación que la llevó a aplicar la robótica hace ya cinco años con la introducción de un sistema que aumentaba la precisión y reducía el tiempo de modelado.
Estas ayudas, enmarcadas dentro de la convocatoria para la transformación digital de la estrategia regional ‘Murcia Industria 4.0’, generaron a su vez una inversión de 1.011.033 euros por parte de las empresas para el desarrollo de proyectos relacionados con robótica, ‘big data’, sensorización, fabricación aditiva o internet industrial de las cosas.
El director del Info, Joaquín Gómez, explicó esta semana, durante su visita a Mármoles Miñarro, en Lorca, que esta primera convocatoria de ayudas ha permitido elevar el número de industrias ‘inteligentes’ existentes en la Región. “Cuando pusimos en marcha este programa, la Región contaba con 24 empresas consideradas ‘inteligentes’. Hoy, apenas un año y medio después, hemos triplicado esta cifra y el número de industrias que han implantado tecnologías conectadas se sitúa en torno a las 75”.
Esta transformación digital en más de medio centenar de empresas “ha supuesto también la creación de más de 50 empleos directos, además de haber contribuido a modernizar e incrementar la competitividad de un sector cuya productividad se sitúa por encima de la media regional”, añadió Joaquín Gómez.
En concreto, la productividad de la industria se sitúa en la actualidad en los 67.435 euros, mientras que la media de la economía regional es de 44.859 euros. “Este índice, sin embargo, se eleva hasta los 92.000 euros cuando hablamos de sectores con mayor valor añadido bruto como la alta tecnología. El esfuerzo del Gobierno regional, además de consolidar y mantener el apoyo al resto de sectores económicos, pasa por impulsar los sectores industrial y tecnológico para que mantengan su actual ritmo de crecimiento y que la Región siga siendo pionera en el proceso de reindustrialización inteligente”, continuó el director de la agencia de desarrollo regional.
Además de a estas ocho empresas del macrosector del hábitat, seis de ellas pertenecientes al sector del mueble y la decoración, una dedicada a la fabricación de estructuras metálicas y una ubicada en el sector del mármol y la piedra natural, esta convocatoria de ayudas ha permitido financiar otros 16 proyectos de innovación en industrias agroalimentarias, de tecnología de riego, del sector naval o de la industria metalmecánica. En total, el presupuesto de esta línea de ayudas fue ligeramente superior al millón de euros, una cantidad que a su vez movilizó una inversión por parte de estas 24 empresas de más de tres millones de euros.
“Se trata de una empresa pionera tanto a nivel nacional como internacional con un fuerte componente innovador y muy implicada en el proceso de reindustrialización inteligente”, concluyó Gómez.
