La Consejería de Salud de la Junta de Andalucía ha identificado un total de 301 casos de silicosis en Andalucía entre los años 2009 y 2018, periodo en el que la mayor incidencia se ha registrado en las provincias de Cádiz, Huelva y Almería, en su mayoría por la manipulación de los conglomerados de cuarzo.
Estos datos han sido facilitados por el consejero de Salud, Jesús Aguirre, durante su comparecencia ante la Comisión de Salud del Parlamento para informar sobre el desarrollo del Programa Integral de Silicosis de Andalucía (PISA), a propuesta de Adelante Andalucía, el PSOE, Ciudadanos y Vox.
La reunión ha comenzado con la elección de María del Mar Sánchez (Cs) como nueva presidenta de la Comisión de Salud por la renuncia de su compañera de partido Isabel Albás, quien ha sido elegida primera teniente alcalde en el Ayuntamiento de Córdoba.
Durante su intervención, el consejero ha recordado que la silicosis es una enfermedad clásica de la actividad minera, pero ha resaltado que en Andalucía muchos de los casos están relacionados con la manipulación de conglomerados de cuarzo y, en concreto, con el corte y pulido de encimeras de cocina y de baño.
«Estamos hablando de una patología emergente», ha advertido Aguirre, que ha reconocido que es «un problema de salud pública».
Fue en 2009 cuando se detectó en la provincia de Cádiz el primer caso de este tipo de silicosis, que provoca un deterioro pulmonar «muchísimo más rápido», ha explicado.
Los casos de silicosis, que llevan aparejados una insuficiencia respiratoria notable, aumentaron entre los años 2010 y 2013; este año se ha producido un descenso de la incidencia en Cádiz, si bien han aparecido en otras provincias, especialmente en Almería y Huelva, la mayoría de trabajadores de pequeñas empresas del sector del mármol.
Sobre el programa PISA, ha recordado que fue el Parlamento de Andalucía, a través de una proposición no de ley, el que instó a la Junta en 2014 a impulsar un instrumento de planificación, aunque ha señalado que su elaboración no garantiza por sí sola la consecución de las metas.
«El programa está muy bien diseñado», ha admitido en el turno de réplica tras haber defendido en su primera intervención la necesidad de llevar a cabo una evaluación del mismo, que según ha dicho ya se está haciendo, y de coordinarse con la Administración central.
La portavoz del PSOE, Noelia Ruiz, ha destacado que el nuevo Gobierno se ha encontrado ya un plan elaborado -Andalucía es la única comunidad que tiene un plan de estas características- y ha instado al consejero a que impulse las acciones necesarias para desarrollarlo.
«El mismo plan señala las actuaciones que hay que poner en marcha», ha subrayado la diputada socialista, que ha puesto el énfasis en la formación de los profesionales y la prevención.
El portavoz de Ciudadanos, Javier Pareja, ha agradecido el «nuevo talante» del Gobierno al decidir que hay que «evaluar» el desarrollo del PISA para mejorar sus objetivos y, en particular, los procedimientos de prevención, seguimiento y control.
La portavoz de Adelante Andalucía, Inmaculada Nieto, ha lamentado que los objetivos del PISA no se «materialicen» y ha dicho que su grupo va a exigir «mayor vigilancia», tras lo que ha defendido que Andalucía tiene que «liderar» una actualización del catálogo de enfermedades profesionales.
El portavoz de Vox, Rafael Segovia, ha criticado que el abordaje de la silicosis no se ha hecho de forma activa en Andalucía, por lo que defendido que hay que cambiar la manera de actuar «haciendo un seguimiento de todos los trabajadores» mediante un registro.
Según Vox, que ha citado un informe de CCOO, los datos son «muy dispares» pues el sindicato asegura que hay 700 trabajadores afectados.