Con motivo del Día de la Silicosis, la Fundación PREMIN —una entidad sin ánimo de lucro que agrupa a empresas, asociaciones, centros tecnológicos y organizaciones de afectados para reducir la incidencia de esta enfermedad profesional— ha hecho un llamamiento a reforzar el compromiso colectivo, poniendo el foco en la necesidad de más prevención, más formación, más mitigación y más innovación en los entornos laborales con exposición a polvo respirable de sílice.
“La silicosis es una enfermedad prevenible. Con voluntad, colaboración e innovación, podemos reducirla hasta hacerla residual. Ese es el compromiso que nos mueve en PREMIN”, ha señalado Manuel Pimentel, presidente de la Fundación.
Desde su constitución en marzo de 2025, PREMIN trabaja para promover una cultura de prevención avanzada que permita proteger eficazmente la salud de las personas trabajadoras. En estos primeros meses de actividad, la fundación ha impulsado diversas iniciativas para generar conocimiento técnico, divulgar buenas prácticas y promover espacios de colaboración plural entre todos los actores implicados.
Entre los hitos más destacados de este periodo figuran: La elaboración de una Guía de Buenas Prácticas para el corte y manipulación de materiales con sílice cristalina respirable en talleres de marmolería, que recoge medidas de control de la exposición, organización del trabajo, protección individual y vigilancia de la salud.
El desarrollo de un checklist técnico que permite a las empresas evaluar de forma práctica el cumplimiento de las principales medidas preventivas ha sido otra de las acciones que ha puesto en marcha organización. Asimismo, un grupo de trabajo médico-científico trabaja ya para analizar la evolución de los diagnósticos, mejorar los protocolos de seguimiento sanitario y orientar futuras investigaciones clínicas.
PREMIN ha tenido una participación activa en foros técnicos y jornadas de prevención en colaboración con universidades, sociedades científicas y administraciones públicas.
La promoción de encuentros entre empresas, mutuas, servicios de prevención y colectivos de afectados para compartir aprendizajes, escuchar todas las voces y construir soluciones comunes también ha estado en la hoja de ruta de PREMIN.
La fundación también ha subrayado que el progreso técnico es uno de los grandes aliados en la lucha contra la silicosis. La innovación en materiales, procesos y equipos puede reducir drásticamente la exposición al polvo respirable de sílice, siempre que se adopte de forma efectiva y con criterios técnicos exigentes.
Además, también está trabajando en las futuras líneas que permitan potenciar la mitigación entre las personas afectadas.
La Fundación PREMIN (Prevención, Mitigación e Investigación de la silicosis) es una entidad sin ánimo de lucro constituida en marzo de 2025 por una alianza plural de empresas, asociaciones sectoriales, centros tecnológicos y colectivos de afectados. Su objetivo es reducir la incidencia de la silicosis y otras enfermedades profesionales relacionadas con la exposición a polvo respirable de sílice, mediante la generación de conocimiento útil, el impulso de buenas prácticas preventivas y el fomento de soluciones colaborativas desde un enfoque técnico, riguroso e independiente. La Fundación trabaja para fortalecer la cultura preventiva, promover la innovación y contribuir a entornos laborales más seguros, saludables y sostenibles.




































