La Oficina de Programas de la Unión Europea de la Diputación Provincial de Teruel (DPT) se ha asociado a un nuevo proyecto con el que potenciará la arquitectura en piedra seca. La iniciativa pretende encontrar e implementar nuevas fórmulas de valorización del Patrimonio Cultural Inmaterial (PCI) promovido y reconocido por la Unesco.
Con el nombre de LIVHES, Living Heritage for Sustainable Development, el programa tiene como principal objetivo relacionar al patrimonio de las áreas escasamente pobladas con el desarrollo económico sostenible y la cohesión territorial. Fue aprobado en la última convocatoria del programa Interreg Sudoe, que se enmarca en el eje 5 Medio ambiente y eficiencia de recursos y participan nueve entidades de España, Francia y Portugal.
La provincia de Teruel tiene como principal objetivo la valorización de la técnica constructiva en piedra seca, para compartir la experiencia en este tipo de construcciones con otras entidades que conservan ese conocimiento y así fomentar su difusión y desarrollo. «Además, se pretende formar a profesionales locales en su elaboración, mejorando su comprensión sobre la importancia histórica y patrimonial de este legado Patrimonio Inmaterial de la Humanidad», explican desde la Diputación de Teruel.
Para aglutinar toda la información, la institución provincial desarrollará una página web, «ya que tiene encargada las tareas de comunicación del proyecto a lo largo de sus 30 meses de duración hasta la primavera del 2023», indican.
El proyecto quiere responder a una necesidad europea y un reto territorial compartido por las áreas escasamente pobladas del sur europeo, entendiendo al Patrimonio Cultural Inmaterial reconocido por la Unesco como herramienta de desarrollo.
Para hacer frente a este reto, las nueve entidades socias identificarán, seleccionarán y estudiarán las mejores prácticas en torno a la valorización del PCI como motor de desarrollo local, para extraer enseñanzas transferibles al espacio Sudoe, implicando a los actores locales y regionales competentes en PCI.
El objetivo es fomentar el desarrollo local mediante la creación de grupos territoriales participativos y generar un diagnóstico consolidado sobre los retos y oportunidades del este patrimonio como motor de desarrollo sostenible, así como realizar un mapa de actores y soluciones innovadoras, según informan desde la DPT.
El resto de socios del proyecto son: la Diputación de Burgos, Pôle Métropolitain Pays de Béarn, de Francia, Fundació Institut Català de Recerca en Patrimoni Cultural, Município de Barcelos (Portugal), la Universidad Pública de Navarra, Institut Occitan de Cultura, Communauté de Communes Pyrénées Haut Garonnaises, ambos de Francia y Agrupamento Europeu de Cooperaçao Territorial do Rio Minho, de Portugal.