Un empresario alemán ha sido adjudicatario de la subasta celebrada en el juzgado de lo Mercantil de Badajoz el 29 de enero para la compra de Grabasa. Se ha quedado con la empresa por 2,1 millones, con 215.000 euros de garantía. Su propósito anunciado es recuperar la actividad. La venta será validada por el juzgado cuando ingrese el resto del dinero.
Tras fracasos anteriores, la subasta se organizó para intentar conseguir fondos para acreedores vendiendo maquinaria, terreno y derechos de las canteras. Hubo una propuesta de compra no por lotes sino por la unidad productiva, esto es, por todo, con el fin de reabrir la empresa. La oferta la realizó Piedra, Canteras y Producción, creada en enero y cuyo domicilio social se ha fijado en Burguillos. Christoph Otto Vetz, miembro de una empresa familiar alemana vinculada a la construcción, es su administrador y socio único.