El sector cerámico español ha activado un total de 49 ERTE que afectan a 5.319 trabajadores desde el estallido de la pandemia sanitaria y hasta el pasado mes de mayo, según recogen los últimos datos de la Seguridad Social. Las cifras muestran que uno de cada tres trabajadores de la industria se ha visto afectado por un expediente de regulación temporal de empleo derivado de la afección económica del coronavirus.
No obstante, eso no quiere decir que los trabajadores afectados por los ERTE estén ahora en el paro, ni mucho menos.De hecho, tras las fuertes caídas de ventas registradas en abril y mayo, tanto empresas como sindicatos coinciden en afirmar que «durante el mes de junio se está trabajando a buen ritmo para recuperar el mayor porcentaje posible de ventas».
«Los datos muestran el total de expedientes presentados y los trabajadores que se incluyen en los mismos, pero las plantillas se ajustan en función de las necesidades productivas», explica un empresario azulejero consultado por el periódico El Mundo. De hecho, esta empresa en concreto negoció un ERTE en marzo, que ejecutó hasta mediados de abril, «y ahora están todos los trabajadores están en sus puestos». No obstante, reconoce que «no sabemos qué puede pasar después del verano, tanto en la evolución de las ventas se refiere como en la evolución de la pandemia sanitaria». «En el caso de que haya rebrotes del coronavirus, quizá necesitemos de nuevo activar el ERTE negociado y aprobado con los representantes de los trabajadores», detalla el directivo.
Por su parte, el secretario de acción sindical de la Federación de Construcción y Servicios de CCOO en Castellón, Jordi Riera, informa de que «alrededor del 80% de las empresas del sector cerámico han negociado ERTE debido a la pandemia sanitaria». «Eso no quiere decir que todas las empresas tengan ahora en marcha estos expedientes, de hecho durante el mes de junio la actividad está siendo muy buena y se está volviendo a normalizar la situación después de los meses más duros por el coronavirus», explica Riera.
La gran incógnita es saber qué puede pasar en el caso de que se detecten rebrotes que obligan a adoptar nuevas medidas sociales que pudieran afectar a la economía. «Por nuestra parte vamos a estar muy atentos por el cumplimiento de todas las medidas, como así está siendo», subrayó el secretario de acción sindical de la Federación de Construcción y Servicios de CCOO.
Los últimos datos ofrecidos por la Conselleria de Economía Sostenible muestran que desde el inicio de la pandemia y hasta el pasado 21 de junio se han solicitado un total de 7.855 expedientes de regulación temporal de empleo en la provincia de Castellón que afectan a 43.230 trabajadores.
En el sector industrial castellonense, la pandemia ha empujado al ERTE a 12.332 personas, de las que 5.319 (con datos hasta mayo) serían de la industria cerámica, es decir alrededor del 40%.
El sector servicios ha sido el más afectado por los ERTE, con 28.086 trabajadores y 6.610 expedientes. Construcción ha solicitado durante la crisis sanitaria 472 ERTE en los que ha incluido a 2.426 trabajadores, mientras que en agricultura se han solicitado 87 expedientes que han incluido a 386 personas.
La caída histórica de demanda que está sufriendo el sector cerámico español debido a los efectos sobre la economía de la Covid-19 aceleró la solicitud de expedientes de regulación temporal de empleo. Desde la patronal Ascer y los sindicatos CCOO y UGT no ocultaron desde el primer momento que la preocupación por la situación era «máxima». Desde la patronal Ascer han recordado desde el primer momento que «la industria es un gran generador de empleo directo de calidad, de empresas auxiliares y de puestos de trabajo indirectos. Sin industria no hay futuro».
Fuente: El Mundo
