El Instituto Balear de la Vivienda está construyendo pisos sociales con piedra, madera y tierra de las islas. Son materiales kilómetro 0. El arquitecto Carles Oliver explica en ‘Escala Humana’, disponible en RTVE Play, que en una promoción de ocho viviendas en Palma de Mallorca han usado, además de tablones de madera reutilizados, piedra de Marés extraída del mismo término municipal y posidonia oceánica que procede de la Cala Gala, una de las playas de la zona, para cubrir los tejados.
“Tienes bajas emisiones de CO2, tienes una buena regulación de temperatura y humedad, y tienes ese coste cercano que sabes que no tendrás problemas de suministro”, comenta Oliver como alguna de las ventajas de usar materiales de proximidad.
El marés vuelve
La piedra marés se empezó a utilizar en los años 50 cuando entraron las primeras máquinas de disco de corte industrial hasta que en los 70 llegó el bloque de hormigón. “Como era muchísimo más barato desbancó completamente al marés por el tema del precio.”, explica el arquitecto. Oliver añade que trabajan con distintas canteras para extraer esta piedra pero también usan marés reutilizado: “No solo las canteras, también estamos reutilizando el marés que había existente en esta obra y en la otra de Son Servera de donde hemos traído el material.”