El arquitecto Álvaro Sans dirigirá el proyecto de reforma del hotel Ambassador Meliá en Madrid que pasará a ser un cinco estrellas.
El «nuevo» hotel es una de sus propiedades en la capital, el antiguo hotel Ambassador, que tras su reforma integral reabrirá en 2016 como Gran Meliá Palacio de los Duques, con 5 estrellas. Aún antes de su apertura, ya ha sido admitido como miembro del selecto club Leading Hotels of the World.
El proyecto de reconversión hotelera está dirigido por el arquitecto Álvaro Sans con gran experiencia en la arquitectura hotelera y que ya participara en proyectos como Melía Avenida de América, Centro de convenciones Gran Melia Victoria además de proyectos en Italia, China y República Dominicana. Con él, Meliá sigue apostando por el concepto de urban leisure resorts, es decir, hoteles ubicados en destinos urbanos pero con un alto componente de ocio, desde espacios gastronómicos de autor y bares afterwork a lujosas instalaciones de spa y bienestar.
La compañía hotelera de la familia Escarrer cuenta con 23 establecimientos en Madrid. El futuro Gran Meliá Palacio de los Duques, ubicado a 200 metros del Teatro Real, ocupa el espacio del mayor convento dominico del siglo XIII, que dio nombre a la calle, y la antigua residencia de los duques de Granada de Ega y Villahermosa, coleccionistas de arte y miembros de la intelectualidad madrileña de mediados del siglo XIX. Su pasión por la pintura de Velázquez -una de cuyas obras donaron al Museo del Prado- se percibe en la exquisita decoración de las habitaciones y de los espacios comunes. El arte es el eje central de la experiencia del hotel.
El elegante palacio dispone en su uso hotelero 180 habitaciones y suites, y diez salas de reuniones, todas con luz natural. Meliá implantará su exclusivo servicio RedLevel, concepto boutique propio de la marca Gran Meliá Hotels & Resorts. Un espacio wellness de estilo asiático, un restaurante gourmet, un enoteca y una coctelería de autor completarán el equipamiento de este lujoso hotel.
«Tenemos el firme compromiso de ayudar a que Madrid recupere su posición como uno de los destinos turísticos de preferencia a nivel internacional, contribuyendo con un producto hotelero único y de calidad excepcional», proclama Gabriel Escarrer, vicepresidente y consejero delegado de Meliá. El ejecutivo destaca el crecimiento natural en la demanda de ocio y negocio que viene experimentando la capital y que Meliá ha podido percibir en sus hoteles madrileños.
