ASCER, la Asociación Española de Fabricantes de Azulejos y Pavimentos Cerámicos, ha destacado que, aunque las cifras oficiales de exportación han crecido ligeramente, ya se reflejan descensos en mercados importantes por el impacto de la crisis del coronavirus a pesar de tratarse de un estado muy inicial de la pandemia. La exportación de baldosas cerámicas en el período enero-marzo de 2020 fue de 722, 3 millones de euros, tal como reflejan las últimas estadísticas oficiales, lo que se traduce en un aumento del 4,5% respecto a 2019.
Entre los datos más significativos señalan caídas en los mercados top del sector tomando como referencia el dato trimestral enero-marzo acumulado. Pero si se tiene en cuenta el dato mensual, las cifras empeoran notablemente: Francia baja un -26%, Reino Unido un -18% e Italia un -28%.
La asociación prevé que los datos que se registren en los meses de abril y mayo serán más negativos, puesto que coinciden con el período en que el confinamiento y las restricciones aplicadas para luchar contra la pandemia han sido más severas. Esto se ha traducido en un impacto directo sobre la demanda.
Oriente Próximo y el Magreb
En relación con la zona de Oriente Próximo la caída ha reflejado una media de un -12% hasta marzo, situándose Arabia Saudita a la cabeza con un -34%, debido a la problemática derivada de la exigencia del certificado de calidad QM, y Líbano con un -80%. Oriente Próximo se une de este modo al Magreb, que previsiblemente arrojará datos negativos en los siguientes meses al coincidir con la celebración del Ramadán, que supone una paralización de la demanda.
Estos datos recabados concuerdan con las primeras impresiones que ASCER trasladó a principios de abril sobre el efecto de la pandemia en el sector. Ya entonces se situaba la caída de la demanda internacional a finales de marzo por encima del 50%. Siguiendo con las encuestas internas más recientes, se prevé que solo en el mes de abril se han dejado de facturar 160 millones de euros, lo que supone una caída del 45%.
Continuando en ese mismo mes en el que la curva del impacto del virus era creciente a nivel mundial, la facturación de la exportación ha caído un 40%. Las empresas del sector han reportado una bajada de los pedidos de un 50%, lo que muestra un claro descenso de la demanda y, en consecuencia, la más que previsible disminución de la facturación en los próximos meses. La producción también comienza a descender con una caída acumulada hasta marzo del -1,9%. (IPI).
Según explica ASCER, si la situación se prolonga y el Gobierno no pone en marcha medidas urgentes de inyección de liquidez y de estímulo de la demanda, las empresas se encontrarán en una situación muy comprometida que hará peligrar su supervivencia y el consiguiente mantenimiento del empleo.
ASCER ha reconocido la dedicación y sacrificio de todo el personal sanitario, así como el de otros trabajadores esenciales. Asimismo, solicita que puedan contar con todos los materiales médicos y de prevención para ejercer su trabajo diario con total seguridad. A la población le hace un llamamiento para que prime la responsabilidad y la cautela durante la desescalada para que todo el trabajo de los sanitarios y el esfuerzo conjunto de la sociedad no se vea menoscabado.