El 11 de abril de 2017 comenzará el juicio contra Antonio Monne, de 55 años de Orosei, el jefe de la cantera de donde se produjo la tragedia, Sergio Floris, 66 años de Cagliari, jefe del servicio de prevención y protección, Giovanni Mele, 71 de Dorgali, e Ignacio Masala, 65 años de Cagliari, propietario de la empresa Mele Giovanni e Figli srl y encargado de la construcción, respectivamente. Los cuatro son acusados de homicidio por imprudencia que tuvo como resultado la muerta de Antonello Mereu, un trabajador de 24 años de Dorgali, que murió mientras trabajaba en una cantera de mármol de Orosei 13 de de marzo de 2014.
El fiscal rechazó la idea de que se tratara de un incidente trivial alegando que la muerte del joven está vinculada a la violación de las normas de seguridad. Solicitud recibida en julio pasado por el juez Claudio Cozzella.
El cuerpo Mereu se encontró poco antes de 7 de la mañana al lado de un bloque de mármol que estaba cortando una máquina. Él tenía una herida profunda en el cráneo a pesar de que llevaba un casco protector.
La primera tesis era la de una caída accidental provocada por un resbalón. Pero la autopsia descartó esta hipótesis.
La víctima, de acuerdo con los hallazgos, había sufrido el accidente, mientras una máquina cortaba un bloque de mármol con un hilo de diamante y la barra de metal le golpeó en el cráneo.