En agosto, el gasto en construcción en Estados Unidos creció 0,6 por ciento lo que supone una tasa anual de 915 mil 100 millones de dólares, alcanzando así un máximo en casi cuatro años y medio, según informó el Departamento de Comercio.
Este repunte se debió, principalmente, a los desembolsos que realizó el sector público y privado en este sector, lo cual apunta a un posible crecimiento económico para el tercer trimestre.
La medición de julio fue revisada para mostrar un incremento del 1.4 por ciento, en vez del avance reportado previamente del 0,6 por ciento.
El reporte estaba programado originalmente para el 1 de octubre, pero su publicación fue retrasadaa causa del ‘shutdown’ del gobierno estadounidense.
El gasto en construcción en agosto se vio impulsado por una alza de 0,4 por ciento en los proyectos públicos y pese a que el gobierno federal dio marcha atrás a varios proyectos de construcción. El gasto en proyectos privados de edificación también creció un 0,7 por ciento, su máximo nivel desde enero de 2009.
El gasto privado en construcciones residenciales subió un 1,2 por ciento, a un récord máximo en cinco años, una leve señal de que las tasas de interés altas están desacelerando la actividad. Respecto al incremento del gasto en edificación residencial, este reflejó proyectos de mejora de viviendas.