Junto al Parque de la Quinta de Fuente del Berro, en una calle bordeada por Castaños de Indias, encontramos esta casa construida a finales de los años 20. La vivienda, que fue residencia del escultor Jorge de Oteiza en los años 50, se encontraba muy deteriorada, y sus fachadas habían sufrido numerosas modificaciones. Se comenzó desarrollando una investigación en el Archivo de la Villa de Madrid, que permitió descubrir los planos del proyecto original. Partiendo de esa documentación se decide recuperar la imagen original de la vivienda: un volumen blanco, con grandes ventanas al exterior y tejado de cerámica a la romana, rodeado por un jardín que parece trepar por la fachada, mediante la incorporación de jardineras de acero forjado. Dentro de la vivienda encontramos una escalera central que trata de incorporar el jardín al interior. Este espacio está envuelto en una malla perforada con forma de palmas de palmera que actúa como un gran biombo que proyecta diferentes sombras en función de la luz. El resultado es algo así como caminar por una gran liana que va relacionando los distintos espacios de la casa por medio de dobles alturas. La composición general de la casa consta de tres plantas con un patio inglés y un pequeño jardín. El interior resalta por su espacio más contemporáneo, lleno de luz y con estancias a doble altura Se ha querido valorar el uso de materiales locales y tradicionales y con ello el uso de texturas naturales para darle una visión de elegancia y naturalidad Fotografía de: David Zarzoso]]>