La sede de ASCER acogió la presentación de cuatro proyectos sectoriales enfocados en el área técnica, en concreto en materia de energía, descarbonización, medioambiente y materias primas. Los estudios elaborados por expertos bajo la supervisión del equipo técnico de ASCER se encuadran en el marco del convenio suscrito con la Conselleria de Hacienda, Economía y Administración Pública de la Generalitat Valenciana.
El secretario general de ASCER, Alberto Echavarría puso en valor los constantes y enormes esfuerzos que las empresas del sector aplican continuamente para su mejor comportamiento medio ambiental. “Nuestra industria está firmemente comprometida con la descarbonización y la optimización en el consumo de recursos naturales, así como con la más estricta protección de la salud de los trabajadores”. Echavarría añadió: “a pesar de los hitos alcanzados históricamente en reducción de emisiones por las empresas, nos encontramos en una encrucijada puesto que los objetivos marcados y los plazos establecidos no son realistas ni alcanzables como vienen a demostrar los estudios”. Por otra parte afirmó que “la industria española (y europea) necesita contar con el firme apoyo de las administraciones, tanto en el aspecto económico como en el aspecto regulatorio vista la gran dificultad técnica a la que nos enfrentamos y el enorme reto económico que supondrá la transición energética”.
La jornada ha estado clausurada por el director general de Economía de la Conselleria de Hacienda, Economía y Administración Pública, José Vicente Todolí.
El “Estudio comparativo de las necesidades energéticas de las aplicaciones de uso de hidrógeno y de electrificación en el sector cerámico. Cuantificación económica de la inversión en infraestructuras energéticas y costes de operación” elaborado por IAG Ingenieros tiene como objetivo estimar las necesidades energéticas e inversiones necesarias para la implantación en el sector cerámico de alternativas de descarbonización que permitan alcanzar la neutralidad climática. Las tres alternativas analizadas se basan en la sustitución de gas natural por hidrógeno renovable y/o por electricidad en distintas fases de proceso, y se ha tratado de estimar la inversión en infraestructura de generación y de distribución necesarias.
Algunas de las principales conclusiones fueron:
- La inversión necesaria para la transformación del sector al uso de hidrógeno renovable o su electrificación supondrá entre 10 y 15 veces la facturación anual del sector (entre 56.619 millones de euros y 81.613 millones de euros) sin incluir el coste de la modificación de los equipos de proceso.
- En términos anuales la inversión supondría tener más que duplicar el precio medio de exportación por lo que los productos quedarían fuera de mercado por su baja competitividad.
- Las infraestructuras de generación eléctrica renovable necesarias abarcarían una superficie de 134,5 km2 en el caso del parque fotovoltaico (18.900 campos de fútbol cubiertos por placas solares) y de 1.116,3 km2 para el eólico (156.400 campos de fútbol cubiertos con aerogeneradores).
- La demanda de electricidad necesaria para sustituir la totalidad del gas natural consumido por el sector cerámico se multiplicaría por 10 hasta los 18,2 TWh al año, con el consecuente incremento de la factura energética.
- La potencia de generación fotovoltaica necesaria para producir la demanda estimada de electricidad renovable es de hasta 16,55 GW. Para cubrir estas necesidades se debería multiplicar por 6 la potencia prevista a instalar en la Comunitat Valenciana en 2030.
- La potencia de generación eólica necesaria para producir la demanda estimada de electricidad sería de 10,8 GW, más del doble de la potencia prevista a desarrollar en la Comunitat Valenciana en 2030.
- La transformación al uso de hidrógeno como combustible supondría casi duplicar el consumo global actual de agua del sector de baldosas cerámicas.