La venta de Granitos de Badajoz continua congelada a falta del último pago pendiente de dos millones de euros que Fairmont Resources tiene que hacer para cerrar la operación de compra que inició en abril del año pasado. El juzgado de lo Mercantil número 1 de Badajoz ha hecho público estos días el requerimiento por el que Fairmont Resources debe hacer efectiva la cantidad pendiente de pago por la adquisición de la unidad productiva antes del 31 de diciembre. También tiene la posibilidad de presentar alegaciones en cinco días.
La canadiense Fairmont Resources realizó el primer ingreso de 150.000 euros para la compra de Grabasa en junio de 2015. Tras ese ingreso contaba con un plazo de tres meses para abonar el resto del dinero, pero ante los problemas para lograr la financiación suficiente –por el Brexit y la inestabilidad política de España, el administrador concursal solicitó en septiembre ampliar dos meses más el plazo para la venta de todos los activos. La juez autorizó la ampliación «en aras del interés del concurso», pero ese tiempo terminó y el juzgado no va a esperar más.
Fuentes cercanas a los trabajadores afirman que la operación no se cerrará. La hipótesis que tienen es que la industria se desmantelará completamente vendiéndose por partes.
«En el pueblo está la gente muy enfadada, pensamos que desde Fairmont se han aprovechado de Grabasa», señalan las mismas fuentes que informan que Michael Dehn- gerente de Fairmont Resources- nunca ha estado ni en Burguillos ni en España».
