Levantina participa en el innovador proyecto llamado Biopromarl, junto a científicos expertos del CSIC -Consejo Superior de Investigaciones Científicas-, con el objetivo de replicar las propiedades de las plantas para proteger las superficies de piedra natural.
La finalidad del proyecto es emplear la tecnología láser para reducir la adhesión de suciedad a las superficies y mejorar las prestaciones de la piedra natural.
Biopromarl está financiado por la Comisión Europea a través del programa FET (Future and Emerging Technologies) de Horizonte 2020, uno de los programas de financiación enfocado en la creación de tecnologías disruptivas.
El nombre del proyecto, BioProMarL, deriva del concepto de «protección bioinspirada del mármol con láseres», y su planteamiento tiene como objetivo encontrar nuevas formas de proteger las superficies de piedra natural inspirándose en modelos del mundo vegetal. Para conseguir dicho fin, Levantina y científicos del CSIC han planteado emplear el uso del láser y el escáner.
La durabilidad y el aspecto estético de la piedra natural se ven perjudicadas por varios factores. En el caso de fachadas y suelos, la lluvia ácida y la contaminación deterioran las superficies. En el caso de piezas interiores como encimeras, los productos químicos y la suciedad también puede hacer que, con el paso del tiempo, la piedra no luzca con todo su esplendor.
Con el tratamiento láser que se está investigando en el proyecto BioProMarL se manipula la superficie de la piedra natural para dotarla de unas propiedades que permitan utilizar la piedra natural de una manera más eficiente para cualquier uso.
Estas propiedades se inspiran en el mundo vegetal, y es que los científicos se han basado en dos especies de plantas: la Nelumbo nucifera, o flor de loto –por su capacidad hidrofóbica-, y la Nepenthes alatasus, una planta carnívora –por su baja adhesión en superficie-.
BioProMarL empleará estrategias para replicar estructuras de seres vivos a través del láser en la piedra natural, impresionando morfologías de superficie funcionales. Con esta tecnología se podrá reducir el impacto de agentes externos en el material y alargar así la vida útil de este material contribuyendo así a la reducción de emisiones de CO2 y la generación de residuos, gracias también a la reducción en el uso de selladores.
Los desafíos a los que se enfrentan los investigadores son encontrar los parámetros adecuados para la obtención de los resultados deseados y asegurarse de la durabilidad de esta nueva estructura, algo fácil para la naturaleza pero todo un reto para la piedra natural.