La Consejería de Economía, Hacienda y Empresa de la Región de Murcia, a través del Instituto de Fomento (Info), concederá ayudas para la mejora de la eficiencia energética del tejido productivo regional. La convocatoria, que se ha publicado en el Boletín Oficial de la Región de Murcia (BORM), cuenta con un presupuesto de 6,2 millones de euros y permanecerá abierta hasta el 28 de junio.
Las ayudas, procedentes del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía, están destinadas al apoyo a empresas que tengan la consideración de pyme o de gran empresa del sector industrial y a empresas de servicios energéticos, con el objetivo de fomentar las actuaciones de ahorro y eficiencia energética que contribuyan a la mejora de la tecnología en equipos y procesos industriales o la implantación de sistemas de gestión energética.
La convocatoria para las pequeñas y medianas empresas establece umbrales de inversión, entre 50.000 euros para la medida de mejora de la tecnología en equipos y procesos industriales y 20.000 euros para la medida de implantación de sistemas de gestión energética. Para las grandes empresas se establece un umbral de 150.000 euros de inversión elegible para la medida de mejora de la tecnología en equipos y procesos industriales y de 30.000 euros de inversión elegible para la implantación de sistemas de gestión energética.
El consejero de Economía, Hacienda y Empresa, Luis Alberto Marín, destacó la importancia de estas ayudas que “están contribuyendo a mantener el pulso de la economía regional en momentos en los que la crisis energética ha aumentado considerablemente los costes de las empresas, al tiempo que permiten avanzar en la transformación sostenible de nuestro modelo productivo”.
50,8 millones de inversión energética desde 2019
En el marco del programa de ayudas a la Eficiencia Energética se han concedido ayudas por un importe de 11,9 millones de euros, en el periodo 2019-2023, lo que ha permitido movilizar 50,8 millones de euros en inversión para reducir las emisiones de dióxido de carbono o el consumo de energía de las empresas beneficiarias. Estas medidas “contribuyen a alcanzar los objetivos de reducción del consumo de energía final marcados por el Parlamento y el Consejo Europeos”, según subrayó Marín.
