La conferencia titulada “¿Azulejos sostenibles? Ahora existe una norma ISO» fue en la que se presentó la norma ISO 17889-1, el primer estándar mundial para definir baldosas de cerámica sostenible, publicado por la Organización Internacional de Normalización el pasado mes de junio.
Los ponentes del encuentro fueron Andrea Contri de Confindustria Ceramica , Maria Chiara Bignozzi, profesora de la Universidad de Bolonia en el sector de Ciencia y Tecnología de Materiales y directora del Centro Cerámico y Marco Mari, presidente de GBC Italia .
Andrea Contri señaló que la norma está compuesta por 38 indicadores divididos entre las áreas ambiental, social y económica y tiene una estructura de calificación múltiple que permite mejorar el nivel de desempeño alcanzado por los productos. La ISO 17889-1 es la primera norma de producto en sostenibilidad a nivel mundial para el sector de la construcción y es un referente para potenciar productos de excelencia, al igual que las producciones de empresas cerámicas italianas, que siempre se han destacado por inversiones e investigación en la contención de emisiones y optimización de procesos productivos. Este estándar también está en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) definidos por la ONU como parte de la Agenda 2030, en particular el número 12 sobre consumo y producción responsables.
En su discurso, Maria Chiara Bignozzi ilustró la aplicación de la norma ISO 17889-1 utilizando datos promedio de la industria de las baldosas cerámicas. Los resultados muestran una situación de excelencia para el sector, ya que se cumplen todos los requisitos obligatorios (15) y se obtiene una puntuación en el rango 124-125, muy por encima del umbral de 117,5. Utilizando para el cálculo también datos que tienen en cuenta las especificidades de las empresas individuales, llegamos a puntuaciones aún más altas, iguales a 126-128. La simulación se realizó principalmente con los datos publicados en el Informe Integrado, documento que informa, desde 2010, del impacto ambiental y factores de desempeño de las industrias de fabricación de azulejos y se basa en las comunicaciones de datos ambientales que las empresas envían anualmente a través de los Informes AIA. (Autorización Ambiental Integrada).
Marco Mari explicó cómo el sector de la construcción sustentable se enfoca en las características ambientales de los materiales, productos y sistemas dentro de sus protocolos de calificación. Al mismo tiempo, existen muchas características y certificaciones que se pueden exigir a los productos para contribuir a las calificaciones de sostenibilidad de los edificios. En este contexto, resulta especialmente interesante lo que propone la norma ISO 17889-1, ya que define métricas estandarizadas para evaluar el nivel de sostenibilidad de las baldosas cerámicas y, en su segunda parte (actualmente en definición), de los materiales de colocación. Por lo tanto, la presidenta Mari acogió con gran satisfacción la solicitud de Confindustria Ceramica, miembro fundador del Green Building Council Italia,
