El fabricante y distribuidor de cocinas y muebles para el hogar Schmidt Groupe, con sede en Lièpvre (Haut-Rhin) prevé invertir 150 millones de euros hasta 2025. El dinero se inyectará en las naves de producción en Alsacia, para modernizar y aumentar la capacidad de producción. Además anuncia que prevé facturar 1.000 millones de euros en 2030 y da primer paso parra la nueva planta en Sélestat de la firma.
En Sélestat (Bas-Rhin), donde se concentran tres centros productivos, la capacidad de producción se triplicará de 2.000 a 6.000 artículos producidos por día. Un incremento de la producción que pasará por la optimización de superficies existentes y la renovación de máquinas. El centro de Lièpvre se modernizará, en particular para adaptarse al teletrabajo.
Estas inversiones son el resultado de un muy buen año en 2021, durante el cual el mercado de cocinas saltó un 25%. El grupo Schmidt cerró el año con una facturación de 640 millones de euros, un 29% más en un año. Y establece la meta de alcanzar los mil millones para 2030.
Estos proyectos de crecimiento van necesariamente acompañados de contratación: se prevén entre 300 y 400 puestos adicionales para 2025, en este grupo de 1.770 empleados. “Para lograr este objetivo, tendremos que reinventarnos, ir a las escuelas para crear vocaciones, trabajar en el futuro” , subraya Laurence Chrétien, directora de recursos humanos de Schmidt Groupe. Tenemos una buena escuela de formación interna que también nos permitirá contratar a personas con menos experiencia, que pueden ser formadas por nosotros”, continúa Laurence Chrétien. La mayoría de las contrataciones (alrededor del 60%) estarán en puestos de producción. Las funciones de mantenimiento, ingeniería y procesos representarán aproximadamente el 25% de la nueva fuerza laboral.