La Concejalía de Patrimonio Histórico del Ayuntamiento de Arucas ha aprobado la ejecución del proyecto de la Iglesia de San Juan Bautista que incluye la revisión de todos los elementos ornamentales exteriores realizados en piedra azul de Arucas.
El proyecto, diseñado por el arquitecto Carlos Castellano Bello y en el que ha colaborado el también arquitecto Pedro Bolaños Armas, consiste básicamente en la revisión de todos los elementos ornamentales exteriores realizados en piedra azul de Arucas de las dos torres que lindan con la Plaza de San Juan (acceso norte), la retirada de todos aquellos elementos que se encuentran en mal estado de conservación, previo inventario de los mismos (a través de un sistema de catalogación de cada una de las piezas), para su posterior restauración. Con esta operación se intentan evitar posibles accidentes a los viandantes y vehículos que transitan por la zona, debido al preocupante estado de conservación que presentan algunos de estos motivos ornamentales (si bien en la actualidad esta parte de la Iglesia ya se encuentra vallada).
Las obras serán ejecutadas, previsiblemente, entre los meses de julio y agosto de este año, si bien poseen un plazo de ejecución de un mes, el Ayuntamiento de Arucas ha concedido hasta tres meses para su completa finalización. El presupuesto total de ejecución por contrata asciende a la cantidad de 50.000 €, que serán aportados íntegramente por el Cabildo de Gran Canaria.
Si bien todo el edificio que ocupa el templo parroquial de San Juan se encuentra propuesto para su declaración como Bien de Interés Cultural, en la categoría de Monumento, desde noviembre de 2015, por lo que es preceptivo que las obras sean informadas favorablemente por la Comisión Insular de Patrimonio Histórico del Cabildo de Gran Canaria, así como por la Comisión Mixta Gobierno de Canarias-Iglesia, es necesario la conformidad del Ayuntamiento de Arucas, según se recoge en la normativa vigente en materia de ordenación urbanística.
Se estima que las obras se llevarán a cabo en una superficie de unos 1.550 metros cuadrados y que el número de piezas a identificar y valorar, así como a retirar, pueden ascender a unas 1.782. Entre las piezas que pueden ser retiradas destacarían los denominados por los labrantes aruquenses «gatos» (crochets) y «palomas» (remates), así como los florones, pináculos y pilastras. Muchas de estas piezas se encuentran en mal estado de conservación debido, entre otros factores, a la oxidación de los sistemas de agarre metálicos (especialmente las conocidas como grapas).
La actual iglesia de estilo neogótico fue construida a partir de 1909, gracias al impulso, entre otros patrocinadores de Francisco Gourié Marrero, a partir del proyecto del arquitecto catalán Manuel Vega March y en la que participaron numerosos labrantes o canteros de Arucas, su finalización no tuvo lugar hasta 1977, cuando concluyen las obras de la denominada torre campanario (de unos 66 metros de altura) que fueron retomadas a partir de 1962, precisamente gracias a otra financiación del Cabido de Gran Canaria.