La Asociación Española de Fabricantes de Azulejos y Pavimentos Cerámicos (ASCER) ha transmitido a los representantes sindicales su preocupación por la creciente deterioración de la situación sectorial en todas sus métricas. Específicamente, el sector cerámico ha experimentado una disminución del 19,8% en la producción durante los últimos 12 meses, una reducción del 17,7% en el valor de las exportaciones y una caída del 26,4% en el volumen de las mismas durante el período enero-julio del año en curso. Además, se ha producido una pérdida de 1.681 puestos de trabajo desde julio del año pasado.
En este contexto, el V Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (V AENC) contempla aumentos salariales que deben considerar no solo la evolución de los precios al consumo, sino también un entorno de crecimiento, como lo experimentan otras actividades económicas. «Lamentablemente, el sector cerámico no se encuentra en una situación que permita cumplir con estos incrementos salariales», han indicado desde ASCER.
El acuerdo V AENC establece explícitamente que los aumentos salariales deben ser acordes con la realidad económica de los sectores y empresas. Se espera que los negociadores tengan en cuenta las circunstancias específicas de su ámbito para fijar las condiciones salariales, con el objetivo de mantener y crear empleo, adaptando las directrices a situaciones de crecimiento desigual.
A pesar de la difícil situación del sector cerámico, ASCER ha ofrecido incrementos salariales para los próximos años, en un esfuerzo por cumplir con el acuerdo. Estos incrementos son del 2,5% para 2023, 2,0% para 2024 y 1,5% para 2025.
«La insistencia en aplicar integralmente los aumentos y garantías establecidos en el V AENC, junto con otras demandas sindicales, parece ignorar deliberadamente el contenido del propio acuerdo y la situación real del sector, lo que podría llevarlo innecesariamente hacia un conflicto laboral», ha indicado ASCER.
La Asociación insta a encontrar un equilibrio que permita cumplir con los compromisos del V AENC y, al mismo tiempo, adaptarse a las circunstancias específicas del sector cerámico, teniendo en cuenta su difícil situación económica.