Han descubierto tres antiguas canteras de mármol en Grecia. El hallazgo ha tenido lugar en el municipio de Caristo en la isla de Eubea y lo han realizado unas empresas que trabajan en la instalación de parques eólicos en la zona.
La primera cantera se encontró cerca de las obras viales junto al parque eólico ubicado al noroeste de la localidad de Amigdalia. Cuenta con dos frentes mineros. El primero y más alto está tallado en hileras de roca natural. Allí han encontrado bloques rectangulares labrados y dos columnas parcialmente terminadas, que se quedaron incompletas cuando se abandonó la cantera.
La segunda cantera se encontró cerca de Trikorfos con dos caras mineras y evidencia de tallado. Muy cerca se encontró una pila de grava como única evidencia de actividad minera. La tercera cantera se encontró al noroeste de Trikorfo. Es más grande que la primera y tiene tres frentes mineros en forma de rectángulo abierto por un lado. En esta cantera se hallaron tres grandes montones de grava y bloques rectangulares de piedra con huella de tallado. Estaban situados en una pendiente, lo que indica que estaban listos para ser transportados.
La arqueóloga que dirige las excavaciones, Evangelia Maniatis, asegura que estas antiguas canteras fueron explotadas tanto por griegos como por romanos. Asimismo, sostiene que dan testimonio de la importancia que tuvo en la antigüedad la extracción de mármol de Caristo en la economía de la isla de Eubea. Las famosas columnas caristianas toman su nombre de este lugar.
El mármol de Caristo también se conocía como mármol de Cipolin (piedra de cebolla) y solo se podía obtener en la isla de Eubea. Es de color blanco verdoso y tiene gruesas vetas onduladas de color verde. Fue muy empleado en Roma a partir del siglo I antes de Cristo, por lo que las canteras pasaron a ser propiedad imperial. También fueron explotadas por los bizantinos hasta bien entrado el siglo V después de Cristo.