El taller de elaboración Mármoles Serymar ha abierto sus puertas hace apenas mes y medio en el Polígono Monzú de Huesca (Calle Ronda, 71). Los socios, Felipe Seral y Jose Ángel Martínez, han sido los impulsores de este proyecto de nueva creación que nace con el objetivo de elaborar todo tipo de piedra natural y materiales porcelánicos.
Felipe Seral, arquitecto de profesión, y José Ángel Martínez, con experiencia como marmolista, llevan tejiendo desde el año pasado la bases para la puesta en marcha de esta iniciativa empresarial. Después de replantearse el proyecto en septiembre y hacer unas previsiones más conservadoras, decidieron arrancar realizando una importante inversión para la puesta a punto desde cero del taller. Para la dotación de maquinaria y herramientas han contado con el asesoramiento y apoyo técnico de Insemac.
La nueva nave de 550 metros cuadros de Mármoles Serymar cuenta con una cortadora puente Denver Tecnika Elite, un brazo grúa, un compresor, una instalación de corte y pulido con agua, almacenador de bastones y diversas herramientas para la elevación y manipulación de los materiales. Todo, suministrado por la empresa Insemac.
“Fuimos a distintos talleres y vimos diferentes marcas. Finalmente optamos por Insemac porque para nosotros es muy importante la postventa. Además, como solo íbamos a tener una cortadora, si la máquina se para, se para el taller, por lo que necesitábamos contar con un soporte inmediato y esto Insemac nos lo puede dar”, explica Felipe Seral.
Afirma que tenían claro que debían trabajar todo con agua y cuáles eran las necesidades básicas pero también fue fundamental la implicación de Raúl Barrionuevo, responsable comercial de Insemac para asesorarles en aspectos técnicos que tenían que ver con la organización del taller. “Se ha involucrado totalmente y nos han resuelto un montón de consultas. Te sientes respaldado y sabes que si surge un problema hay una empresa detrás con un equipo para solucionarlo”.
Felipe cuenta que recibieron una oferta para el equipamiento del todo el taller por parte de Insemac. “La propuesta era muy competitiva y además suponía contar con el servicio técnico. Esto nos hizo decantarnos por ellos”.
Seral destaca el salto cualitativo que supone la cortadora. “He visto talleres que tiene cortadora y los que no la tienen. Es la noche y el día. Nuestra cortadora además de calidad ofrece precisión y nos permite ser dos personas en todo el taller”.
A la importante inversión en maquinaria se unió la reforma total que han tenido que practicar en la nave. Todo tipo de canalizaciones, instalación eléctrica y ahora han comenzado con la labor comercial.
“Todo lo que tiene que ver con el mundo de la decoración y el interiorismo nos interesa, pero no vamos a cerrarnos a nada. Pensamos que podemos aportar valor por nuestro conocimiento y nos gustaría ir más allá de la fabricación de encimeras. También nos interesa entrar en el segmento de la fachada ventilada de pequeñas obras porque es un mercado que está por explotar”.
Mármoles Serymar tiene poder delante la tarea de encontrar su espacio y hacerse un hueco en un mercado maduro para cristalizar el “proyecto de vida” que han trazado sus socios. “Empiezo a ver presupuestos encimera de la mesa y eso es buena señal”, dice Felipe Seral.
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