Entre enero y septiembre de este año, en medio de la pandemia Covid-19, las exportaciones de mármol y granito del estado brasileño de Ceará crecieron un 5,3% con relación al mismo período de 2019. Así lo ha constatado el presidente de la Unión de la Industria del Mármol y Granitos de Ceará (Simagran), Carlos Rubens Alencar, de acuerdo con los datos del Centro Internacional de Negocios Carlos Prado, Federación de Industrias de Ceará y Comex.
Parece que la industria de la construcción civil brasileña, la de Ceará, está en auge. Los pedidos de los constructores señalan que faltan algunos insumos, incluidas rocas ornamentales, lo que ha alentado la demanda.
Además, agrega Rubens Alencar, las inversiones de las empresas mineras en investigación continúan avanzando, lo que indica «un fuerte crecimiento en los próximos dos años». Entusiasmado por lo que ve, el presidente de Simagran-Ceará revela: «Las actividades productivas se están ampliando hoy en los municipios de Santa Quitéria, Uruoca, Massapê, Granja, São Gonçalo, Canindé, Banabuiú, Mombaça, Sobral y Santana do Acaraú, lo que significa internalizar el desarrollo».
Agrega un dato relevante: “Debido al alto potencial de Ceará en cuarcitas y rocas súper exóticas, aquí invierten cerca de 60 empresas del Sureste, con perspectivas concretas de instalar unidades de procesamiento en la ZEPA Pecém”. Carlos Rubens Alencar concluye con más ilusión aún: «Algunos materiales extraídos del suelo de Ceará son ‘must de piedra natural’ en todo el mundo. Puedo garantizar que son marcas reales».