El mercado del mármol de Grecia no ha sido ajeno a la creciente tendencia de concentración de empresas con la previsión de que durante los próximos cinco años mediante la absorción o compra de pequeñas y medianas firmas sean solo grandes grupos quienes dominen el mercado.
La reorganización del sector comenzó el 21 de septiembre de 2017, con la adquisición de Mermeren, con sede en Skopje, de Pavlidis Marble. Las sinergias de la adquisición permitirán que la desaceleración muestre una facturación de 80 millones de euros este año, de la cual el 95% es para exportaciones. Es de destacar que este año, Pavlidis pagó un 1 millón de euros a 400 empleados, sin incluir los bonos.
El segundo movimiento redistribución sector tuvo lugar el 10 de noviembre de 2017 un acuerdo por valor de 31 millones de euros, cuando se revelaron las ofertas de subasta para la liquidación de la empresa en quiebra Lazaridis Marmor, que en las décadas de los ’90 y 2000 fue una de las empresas fuertes industria. Los activos de la empresa con sede en Drama recibieron dos rivales, dos empresas de las que son administradores los propietarios de las canteras de mármol Dionysos-Penteli.
Iktinos Hellas, que cotiza en la Bolsa de Atenas, ha presentado una oferta por la venta de una parcela de 9,2 acres con instalaciones en Markopoulo y 11,2 acres en Xiropotamos, Drama. En octubre pasado, la empresa también subastó activos de Lazaridis Marmor ofreciendo 1,6 millones de euros para un edificio de 6.000 m2 y equipo mecánico, ubicado en el Área Industrial de Drama en un espacio de 41 acres.
La mayoría de los activos de Lazaridis Marmor (plantas industriales, edificios, las existencias de productos, derechos mineros y marcas comerciales) pretenden colocarse a través de concurso a la empresa Energía Nordia que ofrece 31,5 millones de euros. De acuerdo con los participantes del mercado, se espera que la adquisición de activos de Lazaridis dar un impulso significativo a Nordia, que en el año 2016, a nivel de grupo, tuvo una facturación de 14.9 mil. Euros y un beneficio neto de alrededor de 950.000 euros.
No se descartan nuevas operaciones en 2018 en esta línea que amenazan la continuidad de los empresarios del mármol al frente de las grandes empresas griegas del sector.
