El ministro de Medio Ambiente y Acción Climática, João Matos Fernandes, ha informado que es posible que cierren cerca de 10 canteras que no han cumplido con la nueva normativa de vallado y señalización. “Todas las que han eludido sus responsabilidades ya han sido notificadas por el Ministerio Público”.
Las declaraciones del ministro aparecen el mismo día que finaliza la consulta pública del decreto-ley para regular la actividad de las canteras. Sin hacer balance del proceso, destacó que ahora el ministerio procederá a “una evaluación de los comentarios sobre la propuesta”.
João Matos Fernandes recordó que el decreto-ley prevé más restricciones ambientales y pretende prevenir el abandono de la actividad y un mejor control de este sector para minimizar y controlar los riesgos.
“Una cantera es siempre una herida en el paisaje, que se prolonga durante siglos. Por eso, cambiamos muy significativamente las reglas de la actividad”, justificó.
El Gobierno realizó un relevamiento de la situación de las canteras en Portugal, después de que un accidente en el Alentejo provocara víctimas mortales y concluyó, a finales del año pasado, que 21 canteras, de un universo de 185, estaban en mora por falta de vallas.
El 19 de noviembre de 2018, un tramo de unos 100 metros de la EM 255, entre Borba y Vila Viçosa, en el distrito de Évora, se derrumbó debido al deslizamiento de un gran volumen de rocas, bloques de mármol y tierra hacia el interior de dos canteras, causando cinco muertes.
En febrero de este año, el Ministerio Público presentó una denuncia contra ocho imputados, uno de ellos una persona jurídica por «diversos delitos de homicidio e infracción de las normas de seguridad».