Los trabajadores de Privilege Advance Surfaces y los sindicatos UGT y CIG han remitido al juez de lo Mercantil número 1 de A Coruña un informe con posibles irregularidades en el proceso de liquidación de la compañía. Los operarios ya habían denunciado públicamente la intención de los hijos de los propietarios de Quarella -sociedad que ostentaba el 60% del accionariado de la planta- de pujar de nuevo por la fábrica, pero con la intención de acceder a la maquinaria, llevársela para Italia y clausurar las instalaciones del polígono naronés de As Lagoas. Después de investigar las cuentas de la compañía, afirman que sus tesis se refuerzan, ya que sostienen que Quarella ha acumulado pérdidas superiores a los 28,7 millones de euros en los últimos años y por ello cuestiona la capacidad para llevar a cabo un plan de reflotamiento de Privilege.
En el informe remitido al juez, las centrales afirman que «la sospecha parte de la base de que Quarella no puede presentar esta oferta por su nula capacidad de financiación y el liquidador la puede estar utilizando para organizar una subasta ficticia y provocar la subida de la única oferta en su poder». Además, subrayan «la estrecha relación profesional del liquidador y el bufete de abogados» que representa al grupo italiano.
La factoría, que se dedicaba a tablero de piedra para la construcción, entró en proceso de liquidación el pasado 29 de junio, después de reiterados intentos de la Consellería de Industria de lograr Privilege vendiese su parte a otra firma del sector. Después del despido colectivo de la plantilla, la mayoría optó por crear una sociedad anónima laboral para pujar por quedarse con la planta, convencidos de su viabilidad. Son 44 operarios que apuestan por destinar liquidaciones a la compra de la empresa. Pero se han encontrado con que la sociedad Poliver, creada por los hijos de los dueños de Quarella -es decir, los que decretaron la quiebra de Privilege- han presentado también una oferta valorada en seis millones de euros, de los cuales 1,8 se invertirían en el primer año. Sindicatos y trabajadores afirman que no se trata de un plan real, ya que el interés es desmantelarla y llevar la maquinaria a Italia.
La oferta de los operarios está valorada en 3,4 millones de euros, con el compromiso de mantenimiento de 44 empleos, además de puestos inducidos.
La factoría llegó a rondar los 80 operarios en su etapa álgida de actividad.
Privilege es heredera de la antigua Tile Stone, que se implantó en la comarca ferrolana al amparo de la Zona de Urgente Reindustrialización (ZUR), animada por importantes ayudas públicas. No obstante, no fue esta la única ocasión en la que la fábrica de tablero de piedra contó con el amparo de las administraciones. Los trabajadores sostienen que en el período comprendido entre los años 1997 y 2010 las inversiones ejecutadas por la factoría para su modernización ascendieron a 20 millones de euros, 3,5 de los cuales fueron aportados desde el ámbito público en concepto de subvenciones.
Además, a esta cifra hay que sumar la financiación que tanto la Xunta, a través de Xesgalicia, como el Gobierno central, a través de la sociedad Sepides, aportaron al capital de Privilege, en donde ostentaban el 20% respectivamente. En total fueron otros 2,4 millones de euros que, según las centrales, «Quarella debería de devolver por contrato pero que por lo recogido en sus cuentas no hará de forma voluntaria».
Fuente La Voz de Galicia.