La compañía naviera LD Lines, que opera en la autopista marítima que une Gijón y Nantes, ha captado nuevos clientes entre los importadores franceses de granito para obra civil.
Los embarques de granito con destino a Francia se venían realizando en pequeñas cantidades desde hacía tiempo, transportando la piedra en camiones a «mafis» (plataformas metálicas sobre ruedas). Desde el pasado mes de agosto se ha incrementado el volumen de los envíos de este material y se ha comenzado a transportar en los semirremolques, después de haber captado a nuevos importadores franceses, que trasladan unos 30 semirremolques al mes (alrededor de 750 toneladas de carga) de granito portugués para fabricar adoquines.
A esto se suman otros envíos de granito a Francia desde canteras extremeñas, que antes surtían a constructoras españolas de granito para la edificación de viviendas. Tras el pinchazo de la «burbuja inmobiliaria» en España, las empresas extremeñas han optado por reorientar su negocio hacia la exportación de la piedra a Francia, donde aún se mantiene la demanda para la obra civil. El volumen de esta mercancía extremeña puede llegar a superar a la de Portugal.