La comisión de Medio Ambiente de las Islas Baleares ha aprobado la restauración de la antigua cantera de Marès de Son Verí de Baix. Para ello, se utilizará el vertido de residuos de excavación que contribuyan a restituir la topografía original de la zona.
El acuerdo adoptado por el organismo dependiente de la Consejería de Agricultura, Medio Ambiente y Territorio ha sido muy bien recibida tanto por los dirigentes del Ajuntament de Llucmajor como por los vecinos de s’Arenal, puesto que la pedrera de Son Verí de Baix se encuentra situada a escasamente 100 metros de la mencionada localidad turística y residencial, y prácticamente anexa a un popular parque acuático.
La superficie explotada por la actividad extractora de marès –actualmente paralizada– afectó a un total de 10.592 metros cuadrados. Un espacio, cuya recuperación requerirá del relleno de 58.520 metros cúbicos de material.
Según fuentes del departamento dirigido por el consejero Gabriel Company, el proyecto de restauración de la cantera de Son Verí de Baix no prevé llevar a cabo la plantación de especies arbóreas, sino que, en todo caso, se sembrarán gramínias, como, por ejemplo trigo, cebada, etc. Aunque tampoco se descarta la «colonización» natural de la vegetación autóctona de la zona.
La resolución de la comisión balear de Medio Ambiente otorga un plazo máximo de 15 años para concluir el plan de rehabilitación.
fuente: UH Noticias.