La restauración del puente romano de Cabezón de Pisuerga de Valladolid ha finalizado después varios meses de obras.
La empresa Marmolera Vallisoletana ha sido la suministradora de la piedra “caliza Campaspero” para la rehabilitación y reconstrucción mismo.
Tras la última reforma en el siglo XVII, este puente histórico sufrió graves daños tras unas fuertes trombas de agua el pasado año lo que obligó al consistorio a tomar medidas urgentes.
Los trabajos consistieron en el suministro de unos 400 metros de sillares rectos y curvos de caliza Campaspero, dando forma tanto a los pilares redondos y poligonales, como a los ojos de perfil ojival y de medio punto. Así, una vez más Marmolería Vallisoletana aporta su experiencia técnica, profesional y tecnológica para la restauración y rehabilitación del patrimonio mundial.
El puente de Cabezón ha reabierto al tráfico rodado pero ahora una plataforma ciudadana solicita ahora que el tránsito en el puente se limite solo al paso de peatones para mantener su conservación.